Un sexenio de transferencia es un proceso de evaluación que busca reconocer y valorar la transferencia del conocimiento generado a través de la investigación. Este proceso es paralelo al del sexenio de investigación y es gestionado anualmente por la CNEAI (Comisión Nacional Evaluadora de la Actividad Investigadora). Para ser evaluado, el solicitante debe presentar cinco aportaciones relevantes en un periodo de seis años.
Es importante que los solicitantes hayan demostrado previamente su capacidad para realizar investigación significativa, lo que implica haber obtenido evaluaciones positivas en al menos un sexenio en alguno de los campos científicos establecidos. El objetivo principal de este sexenio es reconocer el impacto y la visibilidad de los resultados de la transferencia del conocimiento hacia agentes sociales y económicos.
Las actividades evaluadas se enmarcan en cuatro dimensiones clave:
1. Transferencia mediante la formación de personas: Implica la capacitación y formación de individuos en base a los conocimientos generados.
2. Transferencia a través de actividades con instituciones: Se refiere a colaboraciones y proyectos conjuntos con otras instituciones.
3. Transferencia generadora de riqueza económica: Evalúa cómo la investigación puede contribuir a la economía.
4. Transferencia generadora de valor social: Considera el impacto social positivo que puede derivarse de la investigación.
El proyecto de Real Decreto por el que se desarrolla el Sexenio de Transferencia del Conocimiento e Innovación, una vez que ha sido presentado a información pública, se encuentra en fase de estudio de las alegaciones realizadas y aprobación definitiva para proceder a realizar la convocatoria de sexenios de transferencia 2025.